Malvinas / Historia
La disputa de las Islas Malvinas (1833-1945)
La disputa se renovó a partir de unas declaraciones
de lord Palmerston durante un debate en la Cámara de los Comunes, el 27 de julio
de 1849. Según una cita de The Times, el ministro declaró que "habiendo
estado desocupadas por algún tiempo, Gran Bretaña tomó posesión de ellas y desde
entonces mantiene allí un establecimiento". También aconsejaba "no reabrir un
intercambio de correspondencia que había sido interrumpido por el consentimiento
de una de las partes [acquiescence] y el acuerdo [maintenance] de
la otra" (1). No obstante, existe otra versión de los dichos del ministro.
Según Arce, en otro periódico [el Daily News] la respuesta de lord
Palmerston a la interpelación habría sido que: "no sería productivo reiniciar un
intercambio de correspondencia que había sido concluido por consentimiento común
de ambas partes" (2). A partir de los dichos en los periódicos, Manuel Moreno envió
una cuarta nota de protesta a lord Palmerston, el 31 de Julio de 1849. Luego de
citar los párrafos de los diarios, Moreno le reiteraba que el gobierno de la
Confederación Argentina nunca había aceptado el haber sido despojada de las
Malvinas por Gran Bretaña en 1833. También agregaba que esa legación no deseaba
permanecer en silencio para evitar que ese silencio fuera interpretado como una
confirmación de los dichos atribuidos a lord Palmerston por los diarios (3). El
8 de agosto lord Palmerston respondió que había recibido la nota del 31 de
julio. Según el ministro, su declaración en el debate no presentaba una imagen
precisa del estado de la disputa entre ambos países, y, a pesar de cualquier
afirmación que los diarios pudieran atribuirle, él siempre había entendido que
el asunto estaba aún "pendiente de acuerdo" (4). Esto muestra que, a pesar del
intercambio de protestas y notas, y de la aparente tirantez entre ambos
gobiernos, el de Buenos Aires mantuvo su determinación de no convertir el caso
de las Islas Malvinas en un conflicto fundamental. Para el gobernador Rosas "una
referencia a las islas Malvinas llegó a ser una parte de [su] mensaje anual
(...) lo mismo que la imploración de la guía de Dios" (5). Para el historiador
inglés, este fenómeno que se torna rutinario en las relaciones anglo-argentinas
hasta mediados del siglo XX tiene su explicación en el hecho de que:
Toda la energía de su régimen y de los
regímenes que lo sucedieron se orientaba hacia las fronteras terrestres.
Las vacas y las ovejas, y no las ballenas y las focas, constituían la
preocupación de los principales sostenedores de Rosas y el objeto
principal de sus afectos e inversiones de capital (...) el dominio de
los intereses rurales era la mejor garantía de que dicha cuestión sería
dejada, por así decirlo, en depósito, como un haber congelado en el
juego de la diplomacia, pero nada más (6).
-
The Times, sábado 28 de julio de 1849, p. 2,
col. 6, citado en E. Ferrer Vieyra, 1993, op. cit., p. 99.
-
J. Arce, op. cit., p. 102. Este no cita fuente. Es
notable que la palabra del ministro no figura en los registros del
Parlamento. Ferrer Vieyra sospecha que la afirmación de lord Palmerston fue
suprimida de los Hansard Parliamentary Debates (tercera serie, v.
CVII, col. 1030 a 1070) por sus consecuencias legales, "ya que implica que
en 1833 las Islas Malvinas, eran, a criterio inglés, res nullius"
y no posesión que Gran Bretaña recuperaba como argumentaba en ese momento.
E. Ferrer Vieyra, 1993, op. cit., p. 178.
-
J. Arce, op. cit., p. 102. La nota
decía textualmente que "si de algún tiempo a esta parte la correspondencia
no ha sido tan activa, esto es debido a estar la discusión casi agotada, y
al estado de las relaciones desde la intervención; pero S.E. el Vizconde
Palmerston, en su alto saber, no ha podido sin duda equivocar la suspensión
de la correspondencia por un consentimiento o aquiescencia tácita o expresa,
que de ningún modo se ha dado por el Gobierno Argentino, a los actos a este
respecto del Gobierno de S.M. (...)" E. Ferrer Vieyra, 1993, op. cit.,
p. 178.
-
J. Arce, op. cit., p. 103.
-
H.S. Ferns, op. cit., p. 236. Este historiador
ingeniosamente compara la disputa entre ambos estados con los defectos de un
marido o de una esposa con muchos años de convivencia: un cónyuge se queja
sin que el otro repare en ello.
-
H.S. Ferns, op. cit., p. 237.
Esta información procede de
"Historia General de las Relaciones Exteriores de la Argentina" se
han vinculado solo los temas relacionados con Malvinas. Esta obra esta compuesta
de 14 tomos publicada por Iberoamérica y los Directores son Andrés Cisneros y
Carlos Escudé. El presente material podrá ser utilizado con fines estrictamente académicos
citando en forma explícita la obra y sus autores. Cualquier otro uso deberá
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Historia de las Islas Malvinas
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