Capitulo III - El planeamiento de la Junta Militar
La constitución de la Comisión de Trabajo
113. El día 12-ENE-82, la Junta Militar reunida en el Edificio
Libertador, trató "la planificación militar del caso Malvinas como
acción alternativa, en caso de fracasar la solución negociada con Gran
Bretaña y teniendo siempre el propósito de lograr el objetivo político a
través de un acuerdo". (Informe ex Comandantes en Jefe, Cap. I, pág.
15).
114. En tal oportunidad y por resolución no incorporada al Acta de la
Junta Militar, se designó una Comisión de Trabajo (CT) para "analizar la
previsión del empleo del Poder Militar para el caso Malvinas, con un
enfoque político militar que especificara los posibles modos de acción",
designándose a los señores General de División D. Osvaldo Jorge García,
Vicealmirante D. Juan José Lombardo y Brigadier Mayor D. Sigfrido Martín
Plessl para integrar el organismo encargado de elaborar los documentos
correspondientes.
115. Los integrantes de esta Comisión de Trabajo (CT) que recibieron la
directiva de mantener el máximo secreto, realizaron la tarea
prácticamente sin colaboradores y manuscribieron los documentos
producidos. Los señores JJ.EE.MM. y el Canciller serían informados,
oportunamente, por la Junta Militar. Según las declaraciones de los
integrantes de la Comisión de Trabajo (CT), la directiva no escrita que
recibieron fue la de planificar la toma de las Islas Malvinas. Cabe
acotar que esta decisión resulta prácticamente inédita en los procesos
de planeamiento teniendo en cuenta que se estaba previendo simplemente
la materialización de una hipótesis de guerra no desarrollada hasta ese
entonces, cuando lo normal hubiera sido asignar la tarea del Estado
Mayor Conjunto, organismo específico para ella.
116. Debe destacarse que las restricciones en el manejo de la
información fueron la causa principal por la cual la Comisión de Trabajo
(CT) no pudo realizar la elaboración del planeamiento en forma correcta,
omitiendo consultar a otros organismos del Estado respecto de la
información que debió considerar esencial obtener. DICHA INFORMACIÓN
EXISTÍA en la Secretaría de Planeamiento ya que la hipótesis de
conflicto y la guerra con Gran Bretaña se hallaban contemplados en el
documento "Plan de Inteligencia Estratégica Nacional" (Ámbito Externo)
cuyos lineamientos principales fueron elaborados por la Secretaría de
Planeamiento durante el año 1981 y en el cual se asignaba a este
conflicto la prioridad N° 2 (a continuación del Conflicto Austral) y se
lo calificaba como "Conflicto Grave" e "Hipótesis de Guerra en el corto
plazo" (Fojas 2, 3 y 4 del mencionado documento de la Central nacional
de Inteligencia).
Ni los miembros de la Junta Militar ni los integrantes del Comité de
Trabajo ni tampoco los Miembros del Gabinete conocían la existencia de
estos documentos, los cuales, consecuentemente, no fueron consultados.
(Ver Capítulo VII - La inteligencia estratégica.)
117. Cabe acotar que el requisito impuesto de mantener el secreto no
eximía a la Comisión de Trabajo (CT) de la responsabilidad de elaborar
correctamente el planeamiento, dado que de poco valdría mantener una
intención oculta si no se planificaba debidamente la acción que
permitiría el logro de los objetivos propuestos.
118. Otra circunstancia que influyó notablemente en el proceso de
planificación está dada por los plazos que la Junta Militar fue
imponiendo a su ejecución. Las previsiones originales presuponían un
empleo eventual no anterior al 09-JUL-82, produciéndose luego un
adelanto para no antes del 15-MAY, con el presupuesto de un aviso previo
no inferior a quince días. Finalmente, el 26-MAR-82 se resolvió ejecutar
la operación el día 1° de abril de 1982, alternativamente el día 2 ó 3
de dicho mes.
119. Estos hechos provocaron una superposición en la planificación de
los distintos niveles (Nivel Estratégico Nacional, Nivel Estratégico
Militar, Nivel Estratégico Operacional, y Nivel Táctico).
Ello afectó el proceso de planificación de comando sensiblemente,
teniendo en cuenta dos de sus aspectos básicos.
a. El planeamiento de cada nivel debe estar basado en el del nivel
inmediato superior.
b. La determinación de las operaciones eficaces, que permitirán el logro
de los objetivos xxx son producto de una planificación correctamente
elaborada.
120. Para orientar el desempeño de sus tareas, el Brigadier mayor Plessl
y el Vicealmirante Lombardo fueron instruidos, en los días sucesivos,
por sus correspondientes Comandantes en Jefe; no sucedió lo mismo con el
General de Brigada García, quien no recibió ninguna directiva.
121. Con referencia al criterio del secreto de la operación, es
necesario destacar que el Comandante en Jefe de la Armada, a mediados de
diciembre de 1981, viajó a Puerto Belgrano para poner en funciones al
nuevo Jefe de Operaciones Navales (Vicealmirante Lombardo). En esa
oportunidad, le ordenó, en reunión privada, que estudiara la posibilidad
de la toma de las Islas Malvinas, indicándole que sólo participara la
información a sus almirantes subordinados (Comandantes de la Flota de
Mar, Aviación Naval, Infantería de Marina y Jefe de Estado Mayor). (Ver
declaración VI. Lombardo)
El Comandante en Jefe de la Armada ratificó por escrito esta orden
(Anexo III/2). Esta intención está revelando, por otra parte, una
inquietud operativa por parte del Almirante Anaya, previo a lo que
resolvería la Junta Militar el día 12-ENE-82.
122. Finalmente, no se justifica la necesidad del mantenimiento del
secreto, tan enfáticamente ordenado y observado por la Junta Militar a
la Comisión de Trabajo, para realizar simplemente un planeamiento
preventivo como se adujo en distintas oportunidades.
Los documentos producidos por la Comisión de Trabajo
123. Los integrantes de la Comisión de Trabajo comenzaron a fines de
enero la elaboración de los documentos que darían origen a una operación
para ocupar las Islas Malvinas, y, al no recibir directivas precisas, se
auto fijaron los objetivos a lograr.
En tal sentido, confeccionaron en primera instancia una "Directiva
Estratégica Militar" (DEMIL), cuando lo más correcto y conveniente
hubiese sido la elaboración previa de una "Apreciación y Resolución de
Estrategia Nacional"(ARENAC) -si ésta no hubiese estado confeccionada-
de acuerdo con las normas y doctrinas de planeamiento. Esta tarea, por
otra parte, correspondió a un nivel orgánico superior.
124. En lugar de hacerlo ante la Junta Militar en pleno, el documento
elaborado por la Comisión de Trabajo fue expuesto individualmente por
cada miembro a su Comandante en Jefe, durante el mes de febrero,
mereciendo -salvo pequeñas correcciones- su aprobación.
Esta aprobación individual estaba sustentada por las directivas
impartidas por el COMIL en el sentido de que, por tratarse de
exposiciones que serían realizadas en forma consecutiva de acuerdo con
las fases fijadas para la ejecución de la operación, y ya que con las
fases fijadas para la ejecución de la operación, y ya que la primera de
ellas estaba destinada a la preparación de los elementos participantes
de cada Fuerza y otra por tanto netamente específica, no se justificaba
una reunión del COMIL a tal efecto.
La urgencia provocada por los sucesos de Georgias hicieron que de la
aprobación parcial de cada Fuerza de la Fase Preparatoria debiera
pasarse directamente a la aprobación total del documento. Esto,
obviamente, atentó, desde el inicio, contra el logro de una adecuada
coordinación en todas las actividades a desarrollar.
125. El Brigadier General Lami Dozo requirió que se cambiara el nombre
del documento, ya que correspondía emitir, en realidad, una Directiva
Estratégica Nacional.
Este requerimiento del Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea aproximó el
método de planificación de comando a lo doctrinario, pero no lo corrigió
completamente, puesto que previo a la DENAC se debió confeccionar -o
consultar- una ARENAC. Para dar mayor claridad a lo que queda dicho, en
el Anexo III/3 se detallan gráficamente los documentos que corresponde
emitir, el nivel orgánico involucrado y lo que en la realidad se hizo.
126. Posteriormente, la Comisión de Trabajo se abocó a la confección el
Plan de Campaña Esquemático, basándolo en la DENAC 1/82, cuando hubiese
correspondido, previamente, elaborar una AREMIL/DEMIL.
Este Plan, confeccionado para orientar la planificación de los niveles
inferiores de comando, se realizó sin suposiciones y calculando las
capacidades del enemigo limitadas sólo a las existentes en el TO
Malvinas.
127. El referido plan preveía la ocupación de las islas con una
considerable y numerosa fuerza de tareas anfibia a partir del día "D",
por medio de una operación incruenta, la instalación de un gobierno
militar y un repliegue posterior de las fuerzas, salvo una reducida
guarnición militar de apoyo al gobernador. Todo lo enunciado debía estar
realizado el día "D+5".
128. La DENAC 1/82 y el Plan de Campaña Esquemático fueron expuestos al
COMIL el día 16-MAR-82. Tales documentos merecieron la aprobación de
dicho organismo, el que, en esa misma reunión, asignó al Estado Mayor
Conjunto responsabilidades en la planificación posterior de la
alternativa militar.
Los documentos Producidos en el Estado Mayor Conjunto
129. El día 09-MAR-82, la Junta Militar resolvió que el Jefe del
Estado Mayor Conjunto, como secretario del Comité Militar, comenzara a
trabajar, a partir de esa fecha, como coordinador entre lo militar y lo
nacional para el caso Malvinas.
130. En la reunión del Comité Militar del día 16-MAR-82, el jefe del
Estado Mayor Conjunto presentó un plan de trabajo que fue aprobado y que
incluía la elaboración de los siguientes documentos:
a. Ampliación de la DENAC 1/82, previendo la reacción militar de Gran
Bretaña y una posible intervención de Chile en el conflicto.
b. La confección de una DEMIL reducida que incorporase la situación
planteada en el apartado anterior.
c. Elaboración de un Plan Esquemático de Campaña correspondiente a la
DEMIL reducida. Este plan podía contener, por consiguiente, todas las
previsiones para una reacción militar británica.
131. El COMIL consideró que la próxima evaluación de los progresos de
esta planificación se realizaría hacia fines de marzo. Además, autorizó
la participación del Segundo Jefe de Estado Mayor Conjunto y de los
Jefes de Jefaturas de dicho organismo, desdoblándose así la tarea, a
efectos de cumplimentar lo ordenado.
132. Hallándose el Estado Mayor Conjunto abocado a dicha tarea, lo
sorprendió la decisión de la Junta Militar del día 26-MAR-82 en el
sentido de ocupar Malvinas, sin que se hubiese completado la
planificación correspondiente. En el Anexo III/4 se grafica la situación
del planeamiento estratégico al 16-MAR-82 y al iniciarse la Operación
"Azul".
133. Los documentos en cuya elaboración intervino el Estado Mayor
Conjunto fueron los siguientes:
a. DENAC N° 2/82 (completamiento de la DENAC 1/82).
b. DEMIL N° 1/82.
c. Directiva N° 1/82 del COMIL.
134. EL ESTADO MAYOR CONJUNTO NO ALCANZÓ A ELABORAR EL PLAN DE CAMPAÑA
ESQUEMÁTICO, CORRESPONDIENTE A LA DEMIL 1/82, debido a la falta de
tiempo, dada la decisión de la Junta Militar de adelantar las fechas
previstas para la realización de la operación.