Capítulo VI - El planeamiento contribuyente
El objetivo estratégico
572. La Directiva Estratégica Nacional Nro. 1/82, en su página cinco,
establecía como Objetivo Político el de "CONSOLIDAR LA SOBERANÍA ARGENTINA EN
LAS ISLAS MALVINAS, GEORGIAS Y SANDWICH DEL SUR Y CONTRIBUIR A AFIRMAR SU PLENO
EJERCICIO EN EL ATLÁNTICO SUR".
573. En el mismo documento se expresaba, como resolución estratégica nacional y
esencial, que el "COMIL, ante la evidente y reiterada falta de progreso en las
negociaciones con Gran Bretaña, para lograr el reconocimiento de nuestra
soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur y la explotación
de los recursos renovables, ha resuelto prever el empleo del poder militar para
el logro del objetivo político".
574. En la página ocho de la DENAC Nro. 1/82 se indicaba, como objetivo
estratégico militar, el de "imponer a Gran Bretaña la aceptación de una
situación militar de hecho que de solución definitiva al pleno ejercicio de la
soberanía argentina en las Islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur e impida
nuevos intentos de usurpación, a fin de concretar el objetivo político".
575. En definitiva, puede expresar que el objetivo estratégico quedó orientado
hacia la ocupación de las Islas y su mantenimiento, con vistas a forzar la
realización de negociaciones serias y definitivas, por lo tanto, dicho objetivo
pasó a depender de la evolución de las negociaciones. Por ejemplo, si Gran
bretaña hubiese aceptado sin mayor reacción el hecho consumado mediante una
negociación y reconocido la soberanía argentina sobre las Islas, el objetivo
logrado hubiese sido acorde con las previsiones adoptadas. Por el contrario, la
no aceptación del hecho por parte de Gran Bretaña conllevaba a un objetivo
estratégico demasiado ambicioso, no sustentado sobre bases firmes y coherentes,
tal como su cedió en la realidad.
576. La convicción subyacente de que Gran Bretaña no tendría una reacción
considerable debido al costo integral que ello le presupondría, y que aun en el
caso de Intentarlo, EE.UU. se opondría a una escalada militar en el Continente,
llevó a la Junta Militar a calificar como de "reacción desproporcionada" a la
ofensiva británica. No se comprendió que una modificación de la reacción pasiva
que la Junta Militar habla otorgado al Reino Unido, sin mayores fundamentos,
provocaría que el logro del objetivo estratégico resultase "no factible" y
desproporcionado con respecto a las previsiones adoptadas. Esto ocurrió en
definitiva, y aquel "OCUPAR PARA NEGOCIAR" debió transformarse en "REFORZAR PARA
DISUADIR A GRAN BRETAÑA DE RECUPERAR LAS ISLAS POR LA FUERZA Y OBLIGARLA A
NEGOCIAR"; y aquellos "500 hombres" iniciales debieron transformarse en 3
brigadas. Como puede observarse, la diferencia resultó sustancial.
577. Cabe destacar que un cambio o una limitación en los alcances del objetivo
fijado inicialmente hubiese requerido un margen de maniobra política
considerable, tanto en el ámbito externo como en el interno. Desafortunadamente,
eso no se pudo, no se supo o no se quiso lograr. Particularmente, una de las
causas fue el compromiso asumido ante el pueblo de la Nación, que festejaba
alborozadamente la acción de recuperación de los archipiélagos australes.